El consumo excesivo de bebidas azucaradas como refrescos y aguas frescas provocar sobrepeso y obesidad o enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes tipo 2
Para causar daños en hígado, además de influir en un aumento de peso, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, e hipertensión, no es necesaria la intoxicación por alcohol