Actualmente, la sociedad tiene una vida que exige alta productividad; una vida en la que pareciera que está prohibido descansar, asegura la psicoterapeuta Karen Cruz Hernández.
Agrega, además que dormir muchas veces no significa descansar y nos comparte que existen seis formas de descanso que pueden necesitar tu cuerpo y tu mente.
El primero es el descanso físico, necesario para mejorar la salud física y la salud mental, para recargar energías. Este incluye dormir lo necesario, tomar siestas y hacer actividades reconstituyentes como yoga, estiramiento y masajes.
El segundo tipo de descanso que se recomienda es el mental, el cual es necesario para darle un respiro a nuestro cerebro, principalmente cuando está abrumado de problemas y malos pensamientos.
Se consigue alejándose de pantallas de la computadora y del celular; tomando un tiempo fuera del espacio del trabajo; caminando unos minutos o pasando un rato en silencio .
El descanso emocional es el tercero de la lista. Es necesario para tener un espacio en el que puedas expresar honestamente tus sentimientos y ser auténtico. Incluye pasar un tiempo a solas para reflexionar y ser sincero al interactuar con otras personas.
En cuarto lugar está el descanso social, es necesario para tener conexiones sociales positivas que te revitalicen y te hagan sentir bien, como pasar tiempo con personas que te dan energía y que sean solidarias y positivas.
Está también el descanso creativo, que es necesario para cuando sientas que estás estancado mentalmente. Un paseo al aire libre, un tiempo para apreciar obras de arte, leer algo que te inspire y tener actividades recreativas son esenciales para tener un descanso creativo.
Por último está el descanso espiritual, importante para conectarte con algo más grande que tú, lo cual incluye trabajar en la autoaceptación y la autoestima, que puede obtenerse a través de la religión o la meditación.
Ahora que ya sabes los tipos de descanso que existen y cómo puedes obtenerlo, ¿qué esperas para descansar pero en serio?
