Agencia Reforma
El ayuno intermitente va más allá de la búsqueda de bajar de peso, pues impacta en otros ámbitos de la salud, explica la nutrióloga Cecilia Aguilar.
“Todos hacemos ayuno en algún punto del día, predominantemente en la noche porque nos vamos a dormir y pasamos varias horas sin consumir alimento, inclusive sucede cuando se nos hace tarde y retrasamos la hora de alguna comida”, cuenta.
Sin embargo, al ser algo que modifica el proceso metabólico, debe hacerse bajo la asesoría y acompañamiento de un profesional de la salud, pues tiene consecuencias en la pérdida de masa muscular y la masa grasa, además, a largo plazo, se produce cetosis, es decir, una descompensación corporal debido a la falta de glucosa.
Cuando es llevada correctamente, es una herramienta para la reducción de peso, para modular las afecciones de la obesidad y, eventualmente, prevenir enfermedades crónico-degenerativas.
Sin embargo, antes de glorificarlo, desde la perspectiva de Aguilar, lo que es realmente importante es cuidar la calidad de los alimentos.
“Finalmente, nosotros, como profesionales, tenemos que practicar la nutrición basada en evidencia y eso implica considerar siempre qué es lo que le brindará mucho mayor beneficio y menor riesgo al paciente", explica.
“En lo personal, a mí me gusta explorar más otras estrategias antes de recurrir al ayuno, siempre pensando en mejorar la salud y el estilo de vida de las personas".
Respecto a este régimen, existen opciones: intermitente (no comes durante un periodo cada día o semana), prolongado (varios días) o alternado (cuando cambia la cantidad de calorías por jornada) y hay estrategias variadas en el consumo de kilocalorías.
Lo básico
El ayuno es un patrón de alimentación, no es una dieta.
No implica comer menos, sino prolongar el tiempo entre ingestas.
El primer paso es valorar el perfil metabólico de cada paciente.
Debe evitarse entre quienes sufren diabetes o problemas de presión arterial.
Es importante acompañarlo de macronutrientes y no consumir comida chatarra.
Hay que mantener un control y calidad de los insumos, siempre pensando en la salud.
Fuente: Tania Rubalcaba, nutrióloga especialista en dieta ketogénica
Ayuno, aliado en...
Algunas investigaciones sugieren que reduce la inflamación y mejora las afecciones asociadas a:
Alzheimer
Artritis
Asma
Esclerosis múltiple
Accidente cerebrovascular
Cuidado
El ayuno prolongado sin supervisión médica tiene consecuencias en la pérdida de masa muscular y la masa grasa, además, a largo plazo, se produce cetosis, es decir, una descompensación corporal debido a la falta de glucosa.
