La detección, diagnóstico, tratamiento y seguimiento integral de hipertensión son vitales; además es imprescindible mejorar el estilo de vida y la alimentación.
Así, la detección, diagnóstico, tratamiento y seguimiento integral de hipertensión son vitales; además es imprescindible mejorar el estilo de vida y la alimentación.
El 90 por ciento de las personas con hipertensión la cursan de manera asintomática, de ahí la importancia de la detección y tratamiento oportuno, así como en mejorar el control de los niveles de presión en las personas que padecen la patología. Por lo que es conocido como el asesino silencioso.
De acuerdo con el Sistema Nominal de Información en Enfermedades Crónicas en México hay más de un millón de personas con tratamiento para hipertensión arterial, principalmente mayores de 75 años, de esta cifra solo 65.5 por ciento están controladas.
Este padecimiento es letal, silencioso e invisible, su diagnóstico se realiza con la aplicación del cuestionario de factores de riesgo y la toma de la presión arterial en ambos brazos por tres días consecutivos realizado por personal de salud capacitado.
En caso de que una persona salga positiva, debe tener en cuenta que esta enfermedad es un signo de alerta importante, son necesarios cambios urgentes y significativos en el estilo de vida como: realizar ejercicio diariamente, evitar fumar, reducir la ingesta de sal, no exponerse a situaciones de estrés, así como moderar la ingesta de bebidas alcohólicas, comer frutas y verduras, apego al tratamiento farmacológico.
Actualmente existen casos de hipertensión arterial en adolescentes, este padecimiento puede ser secundario a otras patologías y en los últimos años el incremento de adultos mayores hipertensos se ha elevado 60 por ciento. De esta manera, se sabe que más de la mitad de la población desarrollará hipertensión antes de los 40 años.
Por lo anterior, se estima que para el 2050, alrededor de 20% de la población mundial será mayor de 80 años, y con ello ocurrirá un incremento lineal en la prevalencia de esta enfermedad, siendo México entre los países con mayor prevalencia.
