Viajar por placer tiene grandes beneficios para tu salud espiritual si seleccionas el destino correcto, pues te desconecta de tu mundo inmediato y te separa de la tediosa rutina del trabajo o el estudio.
Llegan las vacaciones y entonces es el momento de concretar esa travesía que anhelas desde hace meses para relajarte y consetirte como hace tiempo no lo haces. Así estarás listo para respirar, desconectarte, purificarte y reconectarte.
Las travesías wellness o de bienestar –señala un artículo de la Agencia Reforma- suelen incluir actividades que revitalizan al cuerpo (circuitos de spa, reflexología, programas de desintoxicación y ejercicio al aire libre) junto con otras que nutren a la mente y al espíritu (sesiones de meditación y retiros de silencio o yoga), por ejemplo.
Cada vez son más personas que procuran mejorar su salud física, emocional y espiritual para tener una mejor calidad de vida.
Si al wellness se le agregan dosis altas de mindfulness (esa milenaria disciplina que enseña a tomar conciencia plena de las experiencias y a concentrarse en el aquí y el ahora poniendo atención en pensamientos, sensaciones corporales y el entorno) se puede disfrutar mucho más de un destino, agrega Reforma.
Hoy, además de trasladarse a otros sitios, viajar también se relaciona con el ir y venir al interior de nuestro ser con los sentidos bien abiertos.
Que en tu próximo itinerario no falten masajes, exfoliaciones y envolventes; así como tratamientos faciales y capilares. También están los circuitos de talasoterapia, los temascales privados y los baños termales.
Hay sitios para todos los gustos y presupuestos, desde los que ofrecen rituales ancestrales y técnicas aprendidas en Oriente, hasta los que hacen uso de tecnología de punta.
Deseamos que pronto halles una experiencia que restaure tu cuerpo y mente y te ayude a tener un reparador descanso: ¡Te lo mereces! (Con información de la Agencia Reforma)