¿Las dietas hacen daño y no funcionan? | Cultura Saludable

¿Las dietas hacen daño y no funcionan?

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Foto(s): Cortesía
Ana Lilia Pacheco

Estudios señalan que el 95 por ciento de las personas que hacen una dieta, van a recuperar el peso perdido en un periodo de entre dos y cinco años.

 

 

 

Michelle Tatarsky Guindi es nutrióloga antidieta, y en entrevista para Cultura Saludable recuerda que pasó ocho años de su vida haciendo dietas restrictivas, odiando cómo se veía en el espejo y con un posible Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA), llegando a tener una relación tóxica con su cuerpo, con la comida y con el ejercicio.

 

 

El daño de las dietas 

Afirma que muchos de las y los pacientes que llegan a su consultorio están en la misma situación, por lo que para ella es importante recalcar que las dietas no funcionan y están haciendo daño de muchas formas, tanto psicológicas como físicas.

 

Menciona que las dietas hacen daño por el “weight cycling”, este patrón que es conocido como rebote, es decir subidas y bajadas de peso constante.

 

Lo que sucede cuando se hace dietas, es que es un ciclo en el que funciona, pero estás insatisfecha con el cuerpo, te restringes, y la restricción causa obsesión. Tienes un atracón de comida, pierdes el control, vuelves a subir de peso, te sientes insatisfecha con tu cuerpo y así, sucesivamente de nunca acabar”.

 

Afectaciones por las dietas restrictivas

La nutrióloga abunda que las dietas restrictivas afectan los niveles de colesterol, cortisol, sangre, glucosa, insulina, además de que aumentan la ansiedad, provocan inflamación crónica y pérdida de masa muscular.

 

Mientras que en la salud psicológica también se ve afectada en la baja autoestima, mala imagen corporal, sentir culpa al comer y tener atracones de comida.

 

“Lo más triste de las dietas es que son el principal factor de riesgo para desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria, pues el problema principal no es que las dietas no sirvan sino que están haciendo mucho daño”.

 

Salud en todas las tallas

 

Michelle Tatarsky expone que como especialista de la salud, se basa en una filosofía en la que no se enfoca en el peso sino en la salud en todas las tallas, ya que sabe que no todas las personas con un peso alto no es sinónimo de enfermedad, ni una persona con peso bajo, es saludable.

 

“Aquí lo que buscamos es mejorar la salud de forma integral. No nos basamos en bajar de peso porque no hay ninguna forma segura, saludable ni que garantice bajar de peso, porque el peso no sólo es comer menos y ejercitarse más como siempre hacen creer”.

 

Afirma que muchas veces las personas no consiguen bajar de peso y se culpabilizan; no obstante, es un tema multifactorial, ya sea por la genética, cómo viven, su estado socioeconómico, entre otras cosas.

 

Incluso, menciona que el Índice de Masa Corporal (IMC), medida que se ha utilizado por años para diagnosticar “sobrepeso” y “obesidad”, es un parámetro que ya está obsoleto, pues no se deben determinar hábitos ni diagnosticar enfermedades basándose en este número.

 

 

Por ello, recomienda que acudas con especialistas de la salud que no se centren en el peso, para así garantizarte una atención digna, sin estigmas ni sesgos, sino quienes te den orientación alimentaria personalizada.

 

Dejar la cultura de dieta atrás no es una tarea fácil, pero es necesario aprender a comer de forma intuitiva, para así mejorar la relación con el cuerpo, dejar de etiquetar los alimentos entre buenos y malos, así como entender que el factor del placer mientras comemos es importante”.

 

 

6 de mayo: Día Internacional sin Dietas:

 

Es una fecha recordatoria para crear conciencia sobre el daño físico que corren las personas que se exponen a estrictos regímenes dietéticos, que inclusive pueden conducir a la muerte.

 

 

Afectaciones físicas de las dietas restrictivas:

  • Niveles de colesterol
  • Cortisol
  • Sangre
  • Glucosa
  • Insulina
  • Inflamación crónica
  • Pérdida de masa corporal



 

Afectaciones psicológicas de las dietas restrictivas:

  • Aumento de la ansiedad
  • Baja autoestima
  • Mala imagen corporal
  • Sentir culpa al comer
  • Tener atracones de comida