Se acerca la temporada de otoño-invierno, época en la que son más recurrentes las enfermedades respiratorias debido a las bajas temperaturas.
Por ello es recomendable adoptar ciertos hábitos preventivos que pueden reforzar el sistema inmunológico, asegura Rafael Ceja López, académico adscrito al Departamento de Salud Poblacional del CUTonalá de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
El especialista indica que consumir alimentos ricos en vitamina C, evitar cambios bruscos de temperatura y aplicarse las vacunas correspondientes, como la de la influenza o de la COVID, son algunas acciones que pueden ayudar a prevenir contagios.
“La vacunación es muy importante porque tarda entre 30 a 45 días en generar anticuerpos, es decir, si ahorita nos vacunamos estaremos bien protegidos para cuando llegue la etapa o la época fuerte de invierno, entre diciembre y enero”, explica el especialista.
Respecto a los alimentos con vitamina C, señaló que se pueden consumir frutas de temporada, como lo son los cítricos: naranja, mandarina y limón.
Neumonía, gripa, covid, faringitis o bronquitis son algunas de las enfermedades que pueden propiciarse en esta temporada del año.
“Podemos tener síntomas muy leves como escurrimiento nasal, tos seca, pero ya cuando vemos alguna dificultad respiratoria, dolor al toser en el pecho, en la espalda, o al respirar, fiebre que no disminuye, son datos de más alarma”, explicó Ceja López.
Dijo que hay que en la detección de la sintomatología hay que poner especial énfasis en personas adultas mayores e infantes menores de los 5 años de edad.
De presentar algún síntoma recomienda acudir con el médico y comenzar a utilizar el cubrebocas.
“La vacunación es muy importante porque tarda entre 30 a 45 días en generar anticuerpos. Si nos vacunamos estaremos bien protegidos para cuando llegue la etapa o la época fuerte de invierno”.
Rafael Ceja López
