Alivian dolor con el dibujo | Cultura Saludable

Alivian dolor con el dibujo

El dibujo como terapia
Foto(s): Cortesía
Redacción

Mientras la quimioterapia que recibe busca eliminar todas las células leucémicas en su sangre, un niño se entrega al arte y consigue olvidarse, aunque sea momentáneamente, tanto del malestar como de su propia enfermedad.

Así lo han atestiguado y fomentado en Unidos por el Arte contra el Cáncer Infantil (UNAC), fundación dedicada no sólo a brindar una mayor esperanza de vida a menores con leucemia, sino a la prevención de otras enfermedades mediante un modelo de trabajo que combina el arte y el aprendizaje lúdico.

"Al trabajar en la pintura y al crear sus propias proyecciones, el niño se absorbe de una manera muy importante en este ejercicio creativo en donde aminora el dolor de su tratamiento y se interesa mucho más en la producción artística que está haciendo", explica en entrevista telefónica la psicóloga Florencia Infante, fundadora y presidenta de UNAC.

"(Hay una) actitud de abstracción total del dolor frente a la creatividad del arte. O sea que arte y belleza se concatenan perfectamente con la bondad y con la absorción de los problemas en relación a la misma creatividad".

Este año, al colaborar UNAC en la convocatoria del "XXV Concurso Internacional de Pintura Infantil MOA" que organizan el Colegio de Arte y Ciencia de la Vida, en Toluca, y el Museo de Arte MOA, en Atami, Japón, la idea del arte como bálsamo capaz de aliviar el dolor resulta más pertinente que nunca para Infante.

Y es que la misma ansiedad, angustia, estrés y temor que han enfrentado los adultos está afectando considerablemente a niñas y niños, con la diferencia de no ser reconocido ni mucho menos atendido, estima la psicóloga.

"El problema central, para mi gusto, es que hemos pensado que los niños, quizá con más fortaleza y con menos problemáticas porque están iniciando su vida, pues los hemos dejado un poco de lado", lamenta.

"La situación debe ser considerablemente distinta. Hay que darles la atención debida porque hay una incomprensión absoluta -y tiene que haberla- en los niños de qué sucede; de por qué el niño está encerrado en una habitación año y medio frente a una máquina tratando de entender lo incomprensible absoluto del mismo ambiente que le rodea", concluyó.