Practicar una actividad física te deshidrata, eso lo sabes; pero en este proceso influye también el clima. Una persona que hace ejercicio regular debe tomar 30 mililitros de líquido por kilogramo de peso en una temperatura promedio, pero si hace calor la cantidad obviamente será mayor.
Si de entrada hay personas que no se hidratan antes ni durante un partido de futbol, por ejemplo, y al terminar ingieren bebidas alcohólicas -en lugar de agua o bebidas isotónicas-, el organismo absorberá más rápido el alcohol y la persona se embriagará más rápido. Además, se deshidratará más porque las bebidas como la cerveza son diuréticas.
Podrás ser el mejor jugador del equipo, e incluso de la liga donde juegas, y querer participar en todos los partidos que te proponen, pero no eres un superhéroe. Un alto desgaste físico puede traerte graves consecuencias, advierte el doctor Takeshi Aoyama, experto en medicina deportiva.
“Hay quienes llegan “en vivo” (desvelados e incluso todavía alcoholizados) al juego y ya lo hacen deshidratados y cansados, y eso genera un riesgo cardiovascular”, alerta el especialista.
Es muy frecuente que una persona dispute dos juegos de futbol en cancha grande, uno en la mañana y otro al mediodía, y eso ni los profesionales de la Champions League lo hacen.
Entonces, tras el primer partido queda adolorido, acalambrado y deshidratado, y luego juega el otro, lo que lo predispone mucho más a sufrir lesiones musculares.
“Todo eso se suma: el ritmo del partido si el rival es muy agresivo, el clima, incluso el terreno de juego y el calzado con el que se juega, todo eso predispone a una lesión”.
Calentar es la clave
Esto es lo mínimo que debería hacer un deportista de fin de semana;
- Antes de un juego, debe tener un calentamiento general de todos los grupos musculares, después un calentamiento específico, dependiendo de la especialidad, por ejemplo, un portero debe hacer ejercicios específicos y diferentes al resto del equipo.
- El objetivo del calentamiento es preparar el cuerpo antes de la sesión general de entrenamiento, que en este caso es el partido.
- En ese calentamiento se debe elevar la temperatura corporal entre .5 y 1 grado adicional a la temperatura basal, porque esto lubrica las articulaciones y hace más viscosos los músculos para tener más capacidad elástica y que no se dañen.
- Tras el calentamiento viene el deporte y al final de éste viene el enfriamiento, que es regresar al cuerpo a la temperatura basal, volverlo a la normalidad, con ejercicios de flexibilidad y estiramientos para relajar músculos y articulaciones, para evitar lesiones. Es decir, al término del partido no se debe sentar.
