Hay diferentes tipos de esguinces y se clasifican en tres clases, según la gravedad.
“Uno es el esguince de grado uno, que es distensión de los ligamentos sin llegar a una rotura; el esguince de grado dos es una rotura parcial del tejido, y el esguince de grado tres es el que presenta la rotura completa de la porción ligamentosa”, explica el fisioterapeuta Daniel Hernández, especialista en lesiones.
Es importante, dice el experto, que los deportistas no tomen a la ligera una lesión, y que en cuanto se sufra de alguna torcedura se acuda de inmediato con el médico especialista para que valore la gravedad, y a partir de ahí comenzar la recuperación.
Muchas personas confían en que, tras sufrir una lesión y con remedios temporales como pomadas o fomentos calientes o fríos van a sanar en 15 días o un mes y se abstienen de acudir a revisión. Con eso lo único que obtienen es que el tejido dañado -que tiene su proceso de reparación- se alargue por meses, en vez de semanas.
Clasificación de esguinces según la gravedad
Esguince de grado 1
Lesión leve. Estiramiento ligero y un poco de daño a las fibras del ligamento que requieren de ejercicios de terapia física.
Esguince de grado 2
Lesión moderada. Es un desgarre parcial del ligamento, que es un aflojamiento anormal en la articulación cuando se mueve de ciertas maneras.
Esguince de grado 3
Lesión grave. Es el desgarro total del ligamento. Esto causa inestabilidad y hace que la articulación no sea funcional, por lo que pueden requerir cirugía para reparar los ligamentos.
