Para la mayoría de las personas es muy importante mejorar distintos aspectos de su vida; pero para que estos cambios tengan repercusiones reales en la vida cotidiana, es necesario hacerlos desde la raíz, combatiendo creencias, estereotipos y traumas adquiridos muchos años antes, e incluso desde la infancia.
Una Manera de conseguir esto -y que está tomando gran relevancia- es el Thetahealing, una práctica creada en 1995 por Vianna Stibal, que consiste en sesiones de meditación guiadas por una especialista, que logra llegar a ese punto en el que ese pensamiento o creencia que afecta nuestra vida actual comenzó, y lo elimina para que podamos seguir adelante, pero de una forma más consciente.
Paola Basauri, practicante y profesora de Thetahealing, explica que este proceso de meditación crea una sanación física, psicológica y mental, y a través de las ondas cerebrales hace una conexión profunda con aquello que quieres cambiar para mejorar tu vida.
“Es para las personas que quieran sanar, hacer cambios en su vida, tener una visión diferente de lo que son actualmente. Se quitan “capas” y al final se hace una mejor versión de ellas”, abunda.
Ondas cerebrales
La practicante detalla que hay diferentes ondas cerebrales cuyas frecuencias tienen que ver con el estado del cuerpo; por ejemplo las ondas delta, que son emitidas cuando el ser humano está en un sueño profundo.
Las ondas theta se producen cuando el cuerpo está relajado de manera profunda sin llegar al sueño, por lo que es el estado que se utiliza para la hipnosis.
Por su parte las beta surgen cuando una persona está en estado de alerta, es decir, despierto y consciente de los pensamientos y acciones que realiza.
Finalmente las ondas gamma reflejan un estado de conciencia más elevado.
- “¿Por qué se explota el estado theta en esta terapia?
Porque podemos actuar directamente en el subconsciente, que es lo que se busca, aunque tampoco queremos que estén dormidos, porque así no se conseguiría trabajar, El estado de relajación profunda es el que ayuda a ver lo que ocurre con el paciente”, explica.
El proceso
Paola relata que al iniciar una sesión -que puede durar hasta una hora- el paciente comparte las cosas o los aspectos que le gustaría trabajar.
Por ejemplo, se trata la creencia muy arraigada de que el dinero es la raíz de todo mal y que eso ha provocado que esa persona no tenga dinero, o algún otro trauma que se arrastra por generaciones y que ha propiciado la toma de malas decisiones en la vida.
“Muchos de nuestros patrones de conducta derivan de esas creencias. Si trabajamos en ellos, va a haber un cambio significativo”, afirma.
De ahí, la Thetahealer, o sanadora, como se le llama a las personas que brindan estas sesiones de meditación, empieza a guiar a través de la respiración y de indicaciones al paciente para que entre al estado theta y se comienza a trabajar para eliminar esas malas creencias.
Comparte que la primera parte de la sesión es la investigación. Aquí se escudriña en los problemas que el paciente refleja, que en muchas ocasiones vienen desde la infancia, por lo que después se van “instalando” nuevas creencias que ayudarán a sanar y mejorar la vida.
“A partir de ahí, la gente se hace consciente de las cosas y entonces habrá un cambio en esa acción, por lo que el número de sesiones dependerá si se llega al problema raíz en esa misma o se necesitarán más días”, explica.
Agrega que el Thetahealing no es sólo para personas que tengan algún problema arraigado sino también para quienes quieran descubrir esta meditación.
“Nosotros pedimos permiso para hacer un escaneo y es cuando pueden decir ‘yo quiero que me escanees para saber y avanzar en mi vida’ o si sólo lo hacen para descubrir su interior”, abunda.
Paola afirma que después de este escaneo y el trabajo de la sesión, la persona sentirá se quitan capas de encima, aunque afirma que a algunos pacientes les es difícil reconocer o expresar lo que les ocurre.
Señala que incluso se puede hacer una visualización del futuro a través de las ondas theta, “pues si tú cambias creencias, tu futuro puede cambiar”.
